7 de noviembre
Sin embargo, el procedimiento para elegir nuevos magistrados del órgano es idéntico al que seleccionó a la nueva CEDH, donde prevalecieron los padrinazgos y vinculaciones políticas.
David Monroy
CUERNAVACA, MOR.- Los antecedentes, apadrinamientos o vinculaciones partidistas de cualquier índole serán el principal criterio de exclusión para los aspirantes a integrarse como magistrados al Tribunal Estatal Electoral (TEE), aseguró el diputado panista, Oscar Sergio Hernández Benítez, quien reconoció que el procedimiento mediante el cual se elegirán a los nuevos funcionarios es idéntico al empleado para renovar la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) que al final fue integrado por recomendaciones de legisladores y altos funcionarios locales.
Luego de que el TEE “aportara” a dos de sus miembros como funcionarios de la administración panista –uno de ellos es el asesor jurídico del gobierno estatal, Pedro Luis Benítez Vélez y el otro el nuevo presidente del Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje (TECA), Ángel Garduño González— y de que el periodo constitucional está a punto de vencer, el Congreso del estado abrió la convocatoria para la renovación de dicho órgano de cuya integración sólo queda Gonzalo Héctor Pomposo Almada Ruíz, cuya participación fue vetada desde ayer debido a que rebasa la edad permitida que es de 65 años, aseguró el legislador.
En entrevista, el también presidente de la comisión responsable del procedimiento para seleccionar a los nuevos magistrados, consideró que entre los 28 inscritos para participar en la selección, existe suficiente capital humano para considerar que se llenarán las expectativas previstas, aunque consideró que primero todos los aspirantes deben pasar exámenes especializados en los temas electorales.
Hernández Benítez reconoció que la forma en que se llevará a cabo la auscultación es idéntica a la empleada en la selección de los consejeros de la CEDH, mismo que no cumplió con las expectativas pus debido a lo largo del procedimiento, los diputados encargados de revisar el asunto, simplemente perdieron interés, de ahí que la mayoría de los aspirantes no fueron revisados de forma profunda. --Los aspirantes, primero debían registrarse, introducir una propuesta de trabajo, hacer un examen y luego presentarse ante los diputados.
Asimismo, ello elevó las suspicacias de que el procedimiento sólo era una mascarada, ya que existían inclinaciones previas muy concretas y de personalidades –incluso del propio gobernador, Marco Antonio Adame Castillo-- a favor de determinados candidatos.
Al respecto, Hernández Benítez consideró que aunque en esta ocasión el procedimiento es muy similar, añadió que el número de aspirantes ayudará a evitar que “el universo (de aspirantes) se cierre y sólo veamos que salen electos los mismos de los que siempre se ha hablado”, acotó.
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