El caso del joven Martín Monroy –miembro de una ONG—es una muestra fehaciente del fascismo que aplican las autoridades civiles y policíacas del estado.
Carlos Hernández
CUERNAVACA, MOR.- El presidente de la Comisión Independiente de Derechos Humanos (CIDH), José Martínez Cruz denunció que el Partido Acción Nacional (PAN) y sus gobiernos encabezan una estrategia de intolerancia y discriminación hacia la juventud, que se refleja en las propuestas y leyes aprobadas desde el arribo del blanquiazul al poder, como el es el caso de la Ley Antigraffiti.
En conferencia de prensa, Martínez Cruz aseguró que el caso del joven Martín Monroy –detenido por la policía preventiva sólo por portar propaganda vinculada a Cuba-- representa una muestra de esta forma de gobierno intolerante y represora, ya que el estudiante de secundaria el único “delito” que cometió fue solicitar el respeto de sus derechos. A cambio, los uniformados lo llevaron detenido.
Martínez Cruz dijo que las autoridades de Cuernavaca, por ejemplo, están influidas por tendencias de ultraderecha que comenzaron con la aplicación de la Ley Antigraffiti y siguieron con detenciones a personas con tendencias sexuales diferentes y siguen con jóvenes cuya forma de vestir o de hablar no satisface los ojos de los gobernantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario